Albert Cañigueral, fundador de Consumocolaborativo.com y conector de OuiShare, ha elaborado el estudio El mercado laboral digital a debate y es autor del libro Vivir mejor con menos: descubre las ventajas de la nueva economía colaborativa, donde da a conocer el consumo colaborativo en profundidad. Ingeniero multimedia, Cañigueral forma parte de la vanguardia de este movimiento que está cambiando la sociedad.

La economía colaborativa representa un cambio social profundo. ¿Cómo se desarrolla en el mundo laboral?

De hecho, hablamos más de la “economía de plataformas” y cada vez menos de “economía colaborativa”. Lo que está ocurriendo es que un creciente número de plataformas digitales están intermediando entre la oferta y la demanda de talento laboral. Del mismo modo que BlaBlaCar intermedia en el ámbito del transporte o Wallapop lo hace en el comercio. Por ahora el ámbito laboral aún tiene una escala reducida, pero sabemos por las experiencias previas que pueden crecer muy rápido.

¿Cómo afectan las nuevas plataformas digitales al futuro del trabajo en sectores como el delivery, los eventos o el diseño?

Las plataformas digitales van mucho más allá que los riders y el delivery. Hoy en día existen plataformas para acceder con facilidad a todo tipo de talento y necesidades. Desde los microtrabajadores (microworkers) en plataformas de microtareas online a los trabajadores bajo demanda (gig workers). También existen plataformas enfocadas a los trabajadores de cuello azul como CornerJob.

La oferta se completa con soluciones digitales para la contratación de freelances y trabajadores de cuello blanco (diseñadores, traductores, programadores, directores de proyectos, expertos en ciberseguridad, etc.). Hasta se pueden encontrar perfiles de alta especialización en plataformas diseñadas específicamente para este tipo de trabajadores. Es un fenómeno global y en rápido crecimiento.

¿Qué cambios implica la economía de plataformas en la relación trabajador-empresa?

Lo que vemos es que la relación laboral tradicional (contrato a tiempo completo e indefinido) tiene un fenómeno de “pixelación laboral” donde la relación entre empleador y trabajador se hace discontinua. En función del tipo de tareas, pueden ser en trabajos de pocas horas, días, semanas o algunos meses, pero en todos los casos, la naturaleza de la relación laboral cambia. Esto tiene implicaciones para el trabajador, las empresas que contratan estos empleados discontinuos y para la sociedad en general (que debe mejorar la protección de este tipo de trabajadores).

Con este nuevo sistema, las personas ya no tienen una única fuente de ingresos, sino que cuentan con varias fuentes en paralelo. ¿Crees que las empresas deberían inventar nuevas fórmulas para dar mayor seguridad laboral?

Sí, de hecho, esto es lo que está ocurriendo ya con el fenómeno del WorkerTech, que se define como la oferta de servicios digitales que aprovechan el poder y la comodidad de la tecnología para ofrecer flexibles beneficios personalizados a los trabajadores independientes a la vez que les facilitan el acceso a sistemas de protección y de defensa de sus derechos.

¿Cómo se traduce el WorkerTech en el día a día del trabajo?

WorkerTech es este nuevo y emergente entramado de servicios pensados para facilitar la representación colectiva, ofrecer los seguros por baja temporal (AXA, WeMind) o bajo demanda por actividad (Zego, Dinghy ), facilitar el acceso a herramientas de trabajo (LiquidSpace, LightShare, HyreCar), ayudar a la creación y mantenimiento de comunidades (DNX Hub, FlyLancer), facilitar la contratación de servicios financieros personalizados (Hurdlr, Portify), obtener beneficios sociales cuando existen múltiples empleadores (Alia), gestionar la reputación y la micro-credenciales (Credly), etc. En este documento online se listan estos y muchos otros ejemplos de WorkerTech.

¿Es el trabajo independiente el futuro del empleo?

Hoy en día un 43% de españoles NO tiene un contrato de trabajo indefinido y a tiempo completo, es decir, tiene otro tipo de relación laboral. Un 17% de españoles trabaja en una plataforma digital laboral al menos una vez por semana. Entre un 1-3% del total de la fuerza laboral genera sus ingresos principales a través de estas plataformas. Es difícil saber cómo se desarrollará en cada sector laboral pero sí que hay indicadores suficientes para decir que el trabajo independiente va a crecer y va a coexistir con las formas más tradicionales de empleo. La idea monolítica que tenemos acerca del «trabajo» evolucionará hacia una mayor diversidad de formas de «trabajo» y «empleo».

Con esta nueva realidad en la que contratas servicios tan distintos, las personas son capaces de confiar en extraños. ¿Crees que la economía de plataformas potencia cada vez más el trato humano?

La generación de confianza entre desconocidos es clave para la economía de plataformas, ya sean Airbnb, BlaBlaCar o una plataforma laboral. Para profundizar en el tema recomiendo el libro Who can You Trust.

No creo que en todos los casos estos sistemas de reputación generen un trato más humano. Este tipo de trato se puede dar en plataformas más orientadas a la socialización y la creación de comunidades. En plataformas más orientadas a la transacción y a la eficiencia el trato no tiene por qué ser más humano.

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